Apataki de Oturupon-Meji
Uyaa que había estado casada con Ogun por mucho tiempo sin haber tenido hijos, conoció un día a Otrupon-Meyi el cual recolectaba hojas en el bosque. El desconociendo que era mujer de Ogun. La mujer se sintió atraída por el y decidió irse a vivir a su lado, pero le dijo que su marido anterior la alimentaba con carne y sangre de los animales que el cazaba.
El le respondio que el lo haría también, ella le dijo que permanecería internada en bosque allí vivirían. El sacrifico un chivo, preparo ñame e hizo una sopa con esto agregando Iyerosun. Cuando le llevo la comida le canto así: Alaghere, eya oche ari. Wa ya gbi eye oni. Aisode laari ibi. Awo onye leeyi oo. Ella salió y comió. Puso las ollas donde el las había dejado. Esto lo hizo por 7 días al séptimo lo siguió a su casa, abandonando el bosque. Al llegar a la casa la mujer enfermo.
Ogun descubrió que Uyaa había sido seducida, comenzó a maldecirla. Su nuevo esposo invito a sus Awoses para que adivinaran, estos le aconsejaron que pagara una dote por ella. (Es por esto que cualquier hijo de Orula que seduzca a una mujer, tendra que pagar una dote por esta). El tenia que sacrificar 1 chivo, gallo, 1 jicotea, 1 perro, y preparar una choza rodeada de hojas de palma cocinar la carne allí y dejar la comida para que el primer esposo fuera a buscarla.
El hizo lo pedido, levantado la choza en mismo lugar que la mujer había vivido en el bosque. Cuando Ogun llego, vio la comida y sin molestarse en preguntar por el seductor, se lo comió todo muy satisfecho de que el seductor hubiera pagado por ella.